23.30 hs. SOBRE LO SUCEDIDO EN CORDOBA.
NOTA RECIBIDA EN SABADOGOL ENVIADA DESDE CORDOBA POR UNO DE LOS ARBITROS DEL PARTIDO DE 6TA. INSTITUTO - QUILMES.
"Leonardo: buenas noches. Me encuentro en Cordoba. Recién terminé de jugar las juveniles de instituto - Quilmes. Quisiera comentarte más o menos lo que sucedió después de la sexta, ya que no quisiera que ninguno de nosotros quede manchado injustamente por un mal entendido de un compañero con el público.
Paso a detallar:
El jugador numero 3 del club QUILMES tenía un dolor fehaciente en el pecho y mis 2 colegas le preguntaron si estaba para seguir (tanto el arbitro como el asistente al que se maljuzga), y el jugador manifestó encontrarse en condiciones para seguir en campo. Dado que dentro de las facultades del arbitro y sus colaboradores no se encuentra la decision de quien debe jugar el partido ya sea por dolor, lesion o malestar no tuvimos mas opción que dejarlo continuar.
Por esto los padres increpaban al asistente 2 acusándolo de "inhumano y asesino", a lo que mi colega contesto "yo no soy medico para decir si corresponde que siga jugando o no". Lo cual es muy distinto a las barbaridades que se han publicado y comprometen seriamente a la terna que una vez finalizado el partido esclareció toda duda con los coordinadores de ambos equipos y hasta actuó con mucha docencia llamando al coordinador de QUILMES apodado "Pancho" para estar al tanto del estado de salud del player del club QUILMES. De hecho te cuento para tu tranquilidad que el juvenil esta bien.
Te pediria por favor si podes agregar alguna de estas cosas que te comenté a la nota pues es la sincera verdad. Hacemos nuestro mayor esfuerzo con mucha dignidad para crecer en nuestra carrera arbitral y en nuestra calidad humana.
De hecho el linea acusado injustamente es profesor de educación fisica y ejerce con mucha vocación de servicio.
En lo personal, me quede hasta ultimo momento con la ambulancia , los directivos y por supuesto el jugador en cuestion
Sin mas agradecido por tu tiempo te saluda atte.
Cristian Ariel Scorza.
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